La superficie terrestre no tocada por el hombre es muy pequeña. La contaminación y los cambios climáticos producidos por el hombre están afectando todo el planeta. Sin embargo, podría decirse que aún existen grandes áreas que se pueden considerar hábitats naturales.

En la región de América Latina y el Caribe existen hábitats de gran importancia en términos ecológicos y especialmente de biodiversidad, dentro de éstos se incluyen las áreas desérticas más secas del mundo, como el desierto de Atacama de Chile y Perú, hasta uno de los bosques más húmedos, como los de la región del Chocó en Colombia.

La región posee áreas de bosques tropicales, subtropicales y templados con una riqueza muy alta en flora y fauna.

Los rasgos naturales de América del sur son: los Andes (la cadena montañosa más larga del mundo), los ríos Orinoco, Amazonas y Paraná-La Plata, todos éstos desembocando en el Atlántico.

Todas estas regiones con una gran riqueza de flora y fauna. Una de las áreas de mayor importancia en el mundo en términos de biodiversidad.

América Latina y el Caribe, posee una gran variabilidad de habitats. De acuerdo con la evaluación del estado de conservación de las ecoregiones terrestres de América latina y el Caribe  realizada y publicada por el Banco Mundial y el Fondo Mundial para la Naturaleza, existen en esta región 5 clases de ecosistemas principales y 11 clases diferentes de hábitats.

La región posee un 42,8% de   bosques tropicales de hoja ancha; 40,6% de pastizales, sabanas y matorrales; 11,6% de formaciones xéricas; 4,1% de bosques de coníferas y bosques templados de hoja ancha y 0,2% de manglares.

La conservación de la biodiversidad es de gran importancia para esta zona. Sin embargo, las actividades humanas han afectado notablemente muchos de estos hábitats causando una gran pérdida de biodiversidad, ésta puede tomar muchas formas pero la fundamental, e irreversible, involucra la extinción de las especies. Por esta razón, es necesario aunar esfuerzos para conservar la biodiversidad y proteger aquellos hábitats que aún se encuentran intactos. El estado de conservación de las ecoregiones en los principales tipos de hábitats revela que un 48% de éstas están ya sea en estado crítico o en peligro; 32% son vulnerables; 16% están relativamente estables y 5% están relativamente intactas. De las ecoregiones xéricas del norte de México no se tienen datos que puedan evaluar el estado de consevación de las mismas. Una de las áreas de mayor preocupación son las ecoregiones de los bosques húmedos tropicales de hoja ancha y de los bosques secos tropicales de hoja ancha puesto que un gran porcentaje de ellas, se encuentran en estado crítico o en peligro.