Dentro del contexto de la ecología del paisaje y del conocimiento de los ecosistemas o unidades del paisaje, las relaciones que son de interés son las relaciones o procesos ecológicos. Lo anterior se refiere a los procesos que se dan en el paisaje de tipo geomorfológico, hidrológico, pedológicos, biológicos, culturales y económicos, los cuales se reflejan en la absorción, reflexión, asimilación, transformación y translocación de energía y materia en el espacio geográfico. Estas relaciones o procesos definen al paisaje como “una porción de la superficie terrestre con patrones de homogeneidad, consistente en un complejo de sistemas conformados por la actividad de las rocas, los suelos, el agua, el aire, las plantas, los animales y el hombre, que por su fisonomía es una entidad reconocible y diferenciable de otras vecinas” (Etter, 1990).